Haciéndome a la idea

Me está costando mucho aceptar que mi madre ha muerto. Será porque llevaba tanto tiempo enferma que parecía que iba a durar para siempre. Me siento mal en cierto modo al estar tan tranquila ante las circunstancias. Cuando mi padre lo llevaba mucho peor, tal vez porque mi madre se quedaba sola. La última vez que fui a visitarla estaba mejor que en mucho tiempo. Justo después se atragantó y le dio una neumonía. En cierto modo me alegro de que haya sido tan rápido. Pasar de estar relativamente bien a sedada en el hospital en estado crítico. Pero tal vez por eso no acabo de hacerme a la idea. Espero que el tiempo ponga todo en su lugar y consiga asumirlo.

Estos días se me han pasado en estado de shock. También es verdad que, como llevo unos cuatro años tomando antidepresivos, las cosas no me afectan como antes. Yo solía ser muy llorona. Ahora me cuestan las lágrimas. Sin embargo, cuando esto pase espero no encontrarme otra vez tirando hacia la cama, como me sucede cuando me deprimo. Me ha costado mucho ponerme en marcha este año para ahora echarlo todo a perder. Además ya he perdido muchas clases de francés y gimnasia. No puedo acabar el texto sin agradeceros a todos vuestro apoyo y vuestras palabras de afecto que, de verdad, me han ayudado mucho.