sábado, 28 de noviembre de 2015

El apocalipsis

Para aquellos que hemos leído las profecías estos tiempos nos recuerdan demasiado a los textos. Decía santa Brígida: cuando los sacerdotes cuelguen sus sagrados hábitos y las mujeres se vistan de hombres y los hombres de mujeres. Otros dicen cuando los cristianos sean tibios y ya casi nadie rece. Cuando en el Vaticano los cardenales estén enfrentados. Entonces llegará la reencarnación del mal y el gran cataclismo. Hace años en la profecía de los Papas leía el peligro del islamismo y pensé que aquello estaba desfasado. Ahora se ha vuelto cruelmente de actualidad.demostrando que nunca se sabe lo que el futuro traerá.

La verdad es que a  veces comprendo a los islamistas radicales viendo nuestro mundo desde fuera. Aborto, divorcios, apología de la homosexualidad, promiscuidad y falta de fe son nuestra realidad. Los valores cristianos no sólo se rechazan sino que se ridiculizan. Ahí es donde los musulmanes se equivocan. Este mundo no representa ya al cristianismo sino al materialismo y hedonismo más puros. El enemigo es otro. No es que merezcamos la muerte pero desde luego no merecemos la vida que llevamos. Para evitar el fin deberíamos estar todos de rodillas rezando. Como no va a ser así, esperemos la misericordia divina.


4 comentarios:

  1. u texto super intenso y me ha gustado mucho

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  2. Yo es que con todos mis respetos, Susana, no estoy por las religiones. Creo que una persona puede elegir creer en Dios sin necesidad de dogmas. Yo estoy a favor del aborto, y mis mejores amigos son homosexuales y los quiero un montón y los defenderé a muerte. Me gusta el Papa actual porque es una persona abierta y moderna.
    Respecto a las profecías, me acordaba estos días de las de Nostredamos a raíz de los espantosos atentados.

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  3. El Papa actual piensa como yo también. Un beso.

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